viernes, 20 de marzo de 2020

La imagen de la mujer en las Leyendas de Bécquer

Gustavo Adolfo Bécquer, escribió una de sus obras más famosas, por no decir la que más, Rimas y Leyendas en las que relata su obra dirigiéndose a la figura de la mujer como un ser superior, inalcanzable y hermoso que nada tiene que ver con las mujeres que vivían por aquel entonces, donde las mujeres permanecían en una dura realidad.

Bécquer se dirige a la mujer como un ser de belleza digna de una Diosa que se encuentran en lugares tenebroso a los que los hombres no pueden acercarse (¡Y qué bien sientan unos ojos azules, muy rasgados y adormidos, y una cabellera suelta, flotante y oscura, a una mujer alta… porque… ella es alta, alta y esbelta como esos ángeles de las portadas de nuestras basílicas!). Este breve párrafo habla de cómo los hombres veían a las mujeres comparándolas con ángeles. El autor usaba continuamente descripciones para sus personajes femeninos con las que nos daba pistas sobre su forma de ser, si es de carácter angelical, es decir, tímida y elegante a la hora de hacer movimientos o más bien el estereotipo de chica ``mala´´ que tienta a varón con más descaro y tiene una forma de actuar tal vez más juguetona y caprichosa. (El Cristo de la Calavera o en los Ojos Verdes).

La forma de ser, un poco bipolar, por parte de los personajes femeninos desembocan en que los personajes masculinos acaben con trastornos mentales (Manrique no estaba aún lo bastante loco para que le siguiesen los muchachos, pero sí lo suficiente para hablar y gesticular a solas, que es por donde se empieza), ya que las mujeres lo enredan en un manto de sentimientos que, en casos extremos, acababa con la muerte de algún que otro varón (Manrique no estaba aún lo bastante loco para que le siguiesen los muchachos, pero sí lo suficiente para hablar y gesticular a solas, que es por donde se empieza).

Gustavo Adolfo Bécquer tenía sin duda una forma muy peculiar de escribir sus relatos, y esto hizo que, a día de hoy sea conocido por lo que aportó a la literatura española.

Antonio García García 4º ESO A

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